José Campos González

José Campos González (Córdoba, 1957) es el mayor de los cinco hijos que tuvo el matrimonio formado por José y Gloria. Los colegios Cervantes, de los hermanos maristas, y Alzahir contemplaron sus años escolares, antes de que cursase estudios de Derecho. Su vocación y profesión de paisajista la alcanzará en la prestigiosa escuela Castillo de Batres en Madrid, estudiando Jardinería y Restauración de Jardines. Ha pronunciado numerosas charlas sobre el tema de la jardinería histórica cordobesa, de la que es especialista; ha colaborado en el libro Córdoba, ciudad eterna (Almuzara, 2007) con un estudio sobre la casa cordobesa; y ha escrito el libro Ganaderías cordobesas de reses bravas. Catálogo 1795-1995 (Cajasur 1998).

Hasta aquí los datos estadísticos, pero realizar una semblanza de Pepe Campos obliga a mucho más. Obliga a enmarcar su personalidad en sus cuatro rasgos fundamentales.

Primer rasgo, el mundo de los jardines. Ha buscado rescatar la tradición jardinera española actualizándola. "Un jardín es toda una vida -afirma Pepe- porque no solo es crearlo, sino conservarlo y legarlo". Él crea rincones de armonía, disfruta haciéndolos y viendo como la gente los vive. Centrado en fincas y chalets de particulares, su mano y estilo se han plasmado en las casas cordobesas de la condesa de Artaza (las Cuevas de Artaza), de Irene Muñoz Sagrera, de Chea Madrid, de Nina Gómez, de Carmen Bravo de Laguna, de Eloy Martínez Sagrera, de la duquesa de Cardona y de Lourdes Millán, entre otras, y fuera de Córdoba en Purchena (Sevilla), Marbella, Toledo, la Sierra de Jaén y Gerona, donde ha realizado el jardín del Museo Fundación Casamor.

Segundo rasgo, su dedicación a Bodegas Campos. "Mi proyecto de vida", como asegura. A él se dedica como reto desde 1988. Su hermano Javier se centra en la faceta de la restauración gastronómica, mientras Pepe se concentra en la decoración y adecuación de esta casa hasta convertirla en un icono de buen gusto y tradición popular cordobesa, herederos ambos del impulso e ideas de su admirado tío Paco. Precisamente tío Paco y Javier precedieron a Pepe Campos en obtener la Fiambrera de Plata. A Pepe se le debe la creación de los salones, cada uno con su nombre e inequívoca personalidad. Y en el año 2008, el primer centenario de Bodegas Campos, Pepe ha asumido un nuevo reto que cuaja la ilusión de mucho tiempo para canalizar el entusiasmo cultural de esta casa: la gestación y dirección de la Fundación Bodegas Campos.

Tercer rasgo, su relación con el Grupo Cántico. A él llega por su tío Paco y por contactos concretos, como ser secretario de Juan Bernier en su trabajo del Catálogo histórico y monumental de la provincia de Córdoba o compartiendo la afición por la investigación con Julio Aumente. Su amistad con ellos y con Pablo García Baena, Ginés Liébana o Miguel del Moral, cuajó, entre otros detalles en la publicación de obras de estos autores y en la creación de la Sala de los célebres, en Bodegas Campos, donde se colgaron los retratos de los protagonistas de Cántico, precediendo a otros célebres cordobeses. Hoy existe ya una sala especial dedicada al Grupo Cántico en esta casa.

Y el cuarto rasgo es Córdoba. Una pasión de fondo en su vida: "Es donde mejor me siento". Se confiesa un enamorado de la obra que realizó el alcalde Antonio Cruz Conde (1951 y 1962). Y hace siete años redactó una declaración tan hermosa como esta: "Hoy, reunidos en la Sala de las Bodegas de Bodegas Campos, un grupo de amantes de esta ciudad y su provincia, preocupados por el olvido de su brillante fundación por Roma y por el letargo cultural en que se halla, y en la creencia de que aún no hemos perdido del todo ser dueños de nuestra historia y de nuestra ciudad en el futuro, nos comprometemos a ilusionar a la sociedad en un proyecto común de identidad".

Recibió la Fiambrera de Plata del año 2008 concedida por el Ateneo de Córdoba.