Rafael Molina "Lagartijo Chico"

Rafael Molina Martínez “Lagartijo Chico”, hijo del gran peón de brega Juan Molina Sánchez y sobrino de Rafael Molina Sánchez "Lagartijo", nació en Córdoba el 16 de julio de 1880. Rafalito encontró en su iniciación todo tipo de facilidades por proceder de familia torera.

Actuó por primera vez con Rafael González "Machaquito" como becerristas el 27 de septiembre 1896 en Córdoba. Hasta 1898 alternó unas veces de banderillero y otras de novillero, ya que en este mismo año ingreso en a la Cuadrilla de Niños Cordobeses organizada por Rafael Sánchez Fernández "Bebe".

Su presentación en Madrid fue el 8 de septiembre 1898 como miembro de la “Cuadrilla de Niños Cordobeses” alternando con su compañero “Machaquito”.

Es digno de mencionar por su singularidad la novillada celebrada en Madrid el 1 de septiembre de 1899, dónde se presentaron las cuadrillas de "Niños Sevillanos" retando a los "Niños Cordobeses". Actuaron por los sevillanos Rafael Gómez Ortega "Rafael el Gallo" y Manuel Molina “Algabeño Chico”, por los cordobeses “Lagartijo Chico” y “Machaquito” con toros de Esteban Hernández, morlacos que gran peso para los de Córdoba. La corrida se dio con gran expectación ya que los cordobeses superaron a los sevillanos en maestría y buen toreo. Rafalito salió triunfante de este encuentro entre figuras prometedoras del toreo.

Llegó la alternativa el 16 de septiembre del 1900 en Madrid, junto a “Machaquito”, fue pocos días después de la muerte de su tío “Lagartijo el Grande”. Luis Mazzantini fue quien lo doctoró pasándoles los tratos para lidiar al toro “Sardinero” de color negro bragao del Duque de Veragua. Le tocaron en su lote dos bueyes y no pudo tener lucimiento.

Al terminal la temporada de 1902 marchó a Méjico llegando a matar el 9 de noviembre cinco toros de Piedras Negras por haber sido herido de gravedad su compañero de terna “Parrao”. El triunfo fue rotundo viniendo a España con más prestigio torero.

Victima de una enfermedad incurable que le va mimando, hace que Rafalito vaya perdiendo fuerza y empaque en sus actuaciones, esto le mengua el número de corridas y triunfos.

Su última corrida en Madrid fue e 17 de mayo de 1908 acompañado de “Machaquito” y Rafael “El Gallo” lidiando los astados “Azafrán” y “Abaniquero". No tuvo éxito con ellos.

Su carrera taurina la despide en la corrida el 4 de octubre de 1908 en Nimes con su compañero inseparable “Machaquito”, con toros de Porladé, demostrando nuevamente el arte que había realizado durante su carrera como matador de toros.

Fue un lidiador de gran estilo, era valiente, toreaba con aplomo, elegancia y gallardía, pues a penas movía los pies de la arena. No quiso el destino, que Córdoba contara con otro Califa del toreo, pues cualidades y facultades tuvo para ello.

Tuvo tres hijas con su esposa Angustia Sánchez que al quedarse viuda se casó en segundas nuncias con Manuel Rodríguez Sánchez "Manolete" (padre) de cuyo matrimonio nació Manuel Rodríguez Sánchez "Manolete". Perpetuó Rafalito Molina la dinastía torera en su nieto Rafael Soria Molina “Lagartijo”, que fue también matador de toros, siendo éste a la vez sobrino de Manolete .

Muere el 8 de abril de 1910 después de haber estoqueado a 735 toros y toreado 296 corridas.

Aunque desigual en sus faenas, lo que deslució en parte su carrera, cuando acertaba se distinguía por su clásica elegancia y por un aplomo singular.

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